El pico y placa es una medida de control vehicular diseñada para reducir el tráfico en las horas de mayor congestión. Esta restricción aplica a los carros particulares según el último número de su placa, impidiendo su circulación en ciertos días y franjas horarias. Por ejemplo, dependiendo del número final de la matrícula, algunos vehículos no podrán transitar los lunes, miércoles o viernes durante los periodos definidos como «horas pico».